jueves, 7 de enero de 2010

La dieta definitiva: Introducción

LA DIETA DEFINITIVA

La salud no es sino el resultado del equilibrio
integral y armónico entre nuestro cuerpo, nuestra
mente y nuestra alma o espíritu, siendo el
desequilibrio entre estos tres aspectos a lo que
llamamos enfermedad.

Toda persona con un notable sobrepeso -no
digamos ya en los casos de claros de gordura u
obesidad- es una persona “enferma”, alguien que no
está sano. Dicho claramente el sobrepeso es una
manifestación de que la persona que lo sufre no
está equilibrada, de que no hay en él armonía.

Dicho esto, queremos darle un consejo: si se
decide a hacer la dieta, dígaselo primero a su
médico y pida que le hagan análisis completos.
En cuanto a las advertencias generales, decirles a
las personas con problemas hepáticos que
controlen -o eliminen- la ingesta de pescados
grasos y desaconsejar que la hagan sin
seguimiento médico a quienes practican deportes
intensos o actividades con fuerte desgaste
energético.

Aunque es verdad que nosotros le proponemos
seguir una dieta para adelgazar, en realidad le
vamos a enseñar a alimentarse.

Es decir, le vamos a explicar como comer a lo largo
de toda su vida sin apenas restricciones, sin pasar
hambre y conservar para siempre la línea.
En suma, cómo mantenerse. Pero antes es preciso
que adelgace. Y de ahí que durante la fase inicial
unas restricciones que no habrá luego en la fase de
mantenimiento. Recuérdelo, porque lo que en
realidad le proponemos es adelgazar ahora... para
no engordar nunca más.

Es importante también que entienda que adelgazar
supone perder grasa, no perder peso o volumen.
Por tanto, entiéndalo claramente: si usted sigue un
régimen pensado para perder peso y volumen, no
adelgazará: paradójicamente, si usted hace un
régimen para perder grasa, perderá a la vez peso y
volumen.

El organismo de los seres vivos tiene como
primordial función mantener el perfecto equilibrio del
cuerpo y, en consecuencia, intenta de forma
permanente conservar la salud. Algo que resulta
difícil de lograr cuando su propietario se empeña en
sobrecargarlo de trabajo e intoxicarlo. Porque eso
es lo que sucede cuando comemos en exceso,
combinamos mal los alimentos o ingerimos comida
inadecuada: imposibilitar al cuerpo que se libere de
tantas toxinas y obligarle a almacenar el exceso de
grasa.

Consecuentemente, para que el organismo se
equilibre, funcione armónicamente y estemos sanos
es preciso desintoxicarse.

Debe además saber que las toxinas son de
naturaleza ácida y que cuando hay acumulación de
ácidos en el organismo lo que éste hace es retener
agua para neutralizarlos con el consiguiente
aumento de volumen y peso.

¿Y cómo eliminar las toxinas?, se preguntará.
Pues, sencillamente, dando tiempo al organismo a
que se deshaga de ellas. Algo que, ya se lo
advertimos, dificultará la ingesta de carne, pescado
y marisco.

Pero como lo que pretendemos es que usted, si no
es vegetariano, adelgace sin dejar de comer esos
alimentos, nos limitamos a sugerirle que no abuse
de ellos y, sobre todo, que siga a rajatabla las
siguientes condiciones que le permitirán poco a
poco desintoxicarse:

1. Que ingiera fruta fresca o zumos todas las
mañanas.
2. Que beba al menos tres litros y medio
diarios de agua.
3. Que haga el ejercicio mínimo recomendado
de caminar. Y
4. Que acompañe todo plato de carne,
pescado, marisco o huevos con una
aceptable cantidad de verduras y hortalizas.

Lo demás vendrá sólo.

Aprender a combinar los alimentos

Mantener la línea o engordar, al margen del
conflicto psíquico o emocional que haya provocado
su ansiedad y el apetito constante, depende mucho
de cómo combine los alimentos. Y, desde luego,
para adelgazar es absolutamente imprescindible
hacerlo bien.

Veamos cómo.

Prácticamente todos los alimentos contienen la
mayoría de los nutrientes: proteínas, lípidos o
grasas, glúcidos o azúcares, fibra, vitaminas,
minerales y agua.
Pero no es menos cierto que
unos alimentos contienen mayor proporción de
grasas o azúcares que otros.

Y si nos centramos en estos dos nutrientes -lípidos
o grasas y glúcidos o azúcares-
es porque
precisamente de ellos depende casi en exclusiva
que se engorde o no.


Pues bien, estas son las cuestiones que debe memorizar para toda su vida:


1) Los alimentos que contienen en sí mismos un
alto porcentaje tanto de lípidos (grasas) como de
glúcidos (azúcares) -los llamados lípido-glucídicosengordan.
Salvo que se coman en muy pequeña
cantidad o se elimine esa energía con ejercicio
físico intenso. Por eso en la fase de
adelgazamiento -y sólo durante la misma- deben
ser completamente suprimidos. (Vea el recuadro
para identificarlos)


2) Los glúcidos de asimilación rápida, salvo que se
tomen solos y en pequeña cantidad, engordan. Y
engordan mucho más si se toman con lípidos
(grasas). También deben ser excluidos durante la
fase de adelgazamiento.

3) Los glúcidos de asimilación lenta -básicamente
las frutas y las verduras- pueden ser ingeridos. Pero
la fruta sólo en ayunas, ya que combinada con
lípidos (grasas) también engorda. Puede tomarse la
cantidad que se quiera, acompañándola de café
descafeinado, té o cualquier infusión autorizada. Y
con nada más. Una vez ingerido cualquier otro
alimento no podrá volver a comer fruta hasta el día
siguiente.

En suma, comer el mismo día lípidos (grasas) y
glúcidos o alimentos lípido-glucídicos, engorda
. O
lo que es lo mismo: los lípidos o grasas sólo
pueden comerse en el mismo día acompañadas de
las verduras y hortalizas autorizadas. Y con nada
más.

LOS ALIMENTOS PERMITIDOS




REGLAS FUNDAMENTALES DE LA DIETA

1) La fruta -entera o en zumo- debe ingerirse
siempre en ayunas y sóla : jamás durante o
después de una comida.
2) Hasta una hora antes del almuerzo se debe comer sólo fruta o zumos de fruta naturales -la
cantidad que se desee-, pero nunca mezclando
las dulces con las ácidas.
3) Excepción hecha de los zumos de las mañanas,
a lo largo del día sólo se debe beber agua -sin
gas- y nunca menos de tres litros diarios,
además de las infusiones.
4) La carne, el pescado, el marisco y los huevos
procurar cocinarlos al vapor, al horno, a la
plancha, asados o cocidos antes que fritos.
5) Las verduras y hortalizas, aliñadas si lo desea,
se pueden tomar solas, combinadas entre sí o
como acompañamiento de la carne, el pescado,
el marisco y los huevos. Mejor comerlas crudas
que cocinadas.
6) No comer requesón de postre si se ha comido
jamón o pescado graso.
7) No pesar o contar la comida. Se puede comer
hasta saciarse sin abusar.
8) El único ejercicio necesario es caminar al
menos 4 km. al día.

Algunas cosas que debe saber:

En cuanto a la forma de cocinar:

· Tanto la carne como el pescado y el marisco
debe cocinarse preferentemente al vapor, al
horno, a la plancha, cocida o asada antes que
frita. En cuanto a las verduras y hortalizas
deberían comerse crudas, pero si decide
cocinarlas prefiéralas igualmente de las formas
descritas antes que fritas.

En cuanto al ejercicio:

* Caminar cuatro kilómetros diarios es suficiente
para adelgazar, pero no deje de hacerlo ningún
día. Puede hacerlo en varios tramos a lo largo
del día, subir escaleras en vez de tomar el
ascensor, etc...

En cuanto a las frutas:

* Ya hemos dicho que deben ingerirse siempre en
ayunas y dejar pasar al menos una hora antes
de ingerir otro alimento. Durante la fase de
adelgazamiento coma sólo las frutas que
aparecen en la lista, el resto de frutas de ingesta
común si no aparecen es porque contienen
demasiada fructosa o porque son lípidoglucídicas.
Queda excluida también la fruta en
almíbar y la envasada en botes de vidrio o en
lata si se le ha agregado azúcar.

En cuanto a los zumos:

* Tome sólo zumos naturales, hechos en casa o
delante suyo, y recuerde no mezcle frutas
ácidas con dulces. También puede hacer
zumos con algunas de las verduras autorizadas,
que a diferencia de los de frutas puede tomar a
cualquier hora del día, incluso durante las
comidas.

En cuanto a la carne, el pescado y el marisco:

* Deberíamos ser vegetarianos. La carne, el
pescado y el marisco, cuando los ingerimos,
están -en mayor o menor grado- empezando a
descomponerse. Además contienen toxinas que
nuestro organismo tiene luego que eliminar. Pero
también somos conscientes de que mucha
gente está dispuesta a adelgazar pero no a
hacerse vegetariana.

Y de ahí que se incluyan
esos alimentos en la dieta. No hace falta decir
que ni la carne, ni el pescado, ni el marisco
deben tomarse rebozados con harina durante la
fase de adelgazamiento. Decir por último, que no
deben ingerirse más de 300 gramos de jamón
curado en un mismo día.

En cuanto a los quesos:

* El único queso que puede tomar es el fresco sin
materia grasa -tipo Burgos-, prefiriendo el de
vaca al de oveja.

En cuanto al café:

* La cafeína es un estimulante del sistema
nervioso central y su consumo está relacionado
con multitud de disfunciones orgánicas. Por
tanto, beber varias tazas al día -costumbre tan
extendida- es perjudicial para su salud. Además,
el café altera el nivel de azúcar en la sangre ya
que su ingesta obliga al páncreas a segregar
insulina.
* Por tanto, si no puede dejarlo, tome poco,
descafeinado y sin leche por supuesto.
En cuanto a las sodas, colas y gaseosas:
* No pueden tomarse. Incluso las light llevan
azúcar.

En cuanto a la leche y los productos lácteos:

* La leche es un alimento lípido-glucídico; es
decir, contiene tanto grasa como azúcar (la
lactosa)
. Y como esta última se encuentra en el
suero de la leche, no puede tomarse ni siquiera
si es desnatada (sin grasa). Ahora bien, la
lactosa se pierde cuando se fabrica el queso.
Por eso se permite comer queso fresco,
requesón sin azúcar o yogur desnatado sin
azúcar. El resto de los derivados lácteos, sin
embargo, o contienen grasa o llevan lactosa.

En cuanto a las bebidas alcohólicas:

* El alcohol es un glúcido (azúcar) de asimilación
rápida, en especial si el estómago está vacío.
Por tanto, las bebidas alcohólicas están
prohibidas durante la fase de adelgazamiento. Y
no se deje engañar por los llamados digestivos y
cervezas sin alcohol: son todos, sin excepción,
glúcidos -azúcares- concentrados y engordan
mucho.
* Pero no se preocupe: cuando haya adelgazado,
podrá incorporarlo racionalmente en su
alimentación, como la mayoría de los alimentos
ahora prohibidos.

En cuanto a las legumbres:

* La razón de que no se tomen en la fase de
adelgazamiento es que liberan glucosa, aunque
bastante menos que otros alimentos glucídicos.
Ahora bien, si está usted dispuesto a ingerirlas
solas y acompañadas nada más que de verduras
de hoja (lechuga, acelgas, espinacas, acederas,
escarola, endibias, o repollo), un poco de cebolla
y prepararlas sin usar grasa alguna (es decir, sin
aceite, margarina, mantequilla, carne, pescado,
marisco o huevos), dése el gusto. Pero en tal
caso recuerde que no podrá ingerir ningún otro
alimento distinto en todo ese día (salvo las frutas
y zumos de la mañana). Decida usted si le
compensa, pero no lo haga más de una vez a la
semana durante esta fase.

En cuanto al azúcar y los edulcorantes:

* El azúcar -en especial el refinado- es un
auténtico veneno para el cuerpo, que además
nos hace engordar. Por eso se recomienda no
tomarlo o si no sustituirlo por edulcorantes
artificiales (sacarinas, aspartamo, ciclamatos,
sorbitol, manitol).

En cuanto a las pastas:

* Las pastas son glúcidos y por tanto deben ser
excluidos por completo durante la fase de
adelgazamiento. Además suelen estar hechos
de harinas blancas refinadas y elaboradas
generalmente con aceite, mantequilla, huevo,
queso y otros nutrientes lipídicos, es decir,
grasas. Y ya hemos dicho que la mezcla de
glúcidos y lípidos es, precisamente, lo que hace
engordar. Incluso si la pasta está hecha de
harina integral, mucho mejor y más digestiva.
* Por eso, aunque hay quién pretende hacer creer
que ingiriendo sólo pastas se adelgaza, esté
seguro de que eso sólo es posible si usted es
una persona que come poco, es muy activa y
hace mucho ejercicio; de lo contrario, se pondrá
como un tonel.

En cuanto al pan:

* El pan engorda, esté elaborado con harina
refinada o integral. Ciertamente, el pan integral
es mejor porque su digestión es mucho más
lenta, libera la glucosa más despacio y contiene
mucha más fibra, facilitando el tránsito intestinal.
Pero es un glúcido y, por tanto debe ser
excluido por completo en la fase de
adelgazamiento.

En cuanto al arroz:

* Se trata de almidón, es decir, de un alimento
glucídico, y debe ser excluido de la dieta
durante la fase de adelgazamiento.

En cuanto a las patatas:

* Se trata de una fécula compuesta de almidón;
es decir, de un glúcido cuya liberación de
glucosa durante su metabolización es muy alta
y rápida. Por tanto debe ser eliminada sin
contemplaciones de la dieta durante esta fase.

En cuanto a los frutos secos:

* Los frutos secos, son alimentos lipido-glucídicos
y, por tanto, engordan por sí mismos, se
combinen con otros alimentos o no. De hecho,
tienen tanto poder energético que su ingesta sin
el adecuado ejercicio compensatorio es causa
suficiente para engordar.

En cuanto a la comida envasada:

* Buena parte de la comida enlatada, además de
conservantes y otros elementos no beneficiosos
para la salud, contiene azúcar. Por tanto, antes
de comprar comida en lata, en frascos de vidrio
o envuelta al vacío en plástico, lea bien la
composición de la etiqueta. Y si tiene azúcar no
la compre. Verificando lo cual, comprobará que
podrá comprar envases de sardinas, atún,
bonito, ventresca, anchoas, mejillones,
salchichas y otros muchos productos.

En cuanto a las salsas y otros condimentos:

* Las salsas están prohibidas salvo que las haga
usted mismo de forma natural con los alimentos
permitidos y sólo con ellos. No se engañe con lo
de “por un poquito de ... no pasa nada”. Y, por
supuesto, nada de ketchup o mostaza.
* En cuanto al vinagre, cuyo está tan
incomprensiblemente extendido a la hora de
aliñar las ensaladas, ha sido excluido de la dieta
porque suspende la digestión salival y retarda la
digestión de los carbohidratos.
* En cualquier caso, puede hacer una excepción
ocasionalmente e ingerir un poco de mayonesa
con el marisco o el pescado.

MUY IMPORTANTE

No “adapte” la dieta a su gusto y cree sus propias normas. Salvo que sea usted nutrólogo, puede hacer que todo su esfuerzo sea infructuoso. Y, sobre todo, tenga presente esto:

1) Sólo adelgazará si de verdad quiere hacerlo. Es decir, si se compromete consigo mismo (no con los demás).
Por tanto resulta tonto que se autoengañe saltándose las normas de la dieta a escondidas.
2) No se busque excusas como la de “porque hoy me lo salte, no pasa nada”. Porque si lo hace, a los 3 o 4 días pasará lo mismo. Además, tal vez eso le haya servido en otras ocasiones para perder unos kilos, sobre todo si usted es ya un “experto”, es decir, que ya ha seguido todo tipo de dietas... pero sigue gordo. Esta dieta no pretende sólo que usted pierda unos kilos, elimine líquido o se deshinche: la pretensión es que usted sea una persona delgada el resto de su vida. Por tanto, lo reiteramos: comprométase en serio con usted mismo y le aseguramos que cosechará los resultados mucho antes de lo que imagina. Pero resultados... permanentes. Y piense que una vez adelgace, podrá volver a comer prácticamente de todo... conservando su nuevo peso y su figura para siempre.

¿QUE COMER ENTRE HORAS?

Son muchos los alimentos de la Dieta Definitiva que se pueden tomar entre horas, sin compañamiento, para matar el gusanillo. En realidad, buena parte se prestan a ello. Es el caso de los siguientes:

Jamón serrano , Boquerones en vinagre, Espárragos
Jamón York, Anchoas en aceite ,Palmitos
Fiambre de pavo, Berberechos, Rábanos
Fiambre de pollo, Angulas, Palitos de pescados
Salchichas de pavo, Gulas, Salmón ahumado
Salchichas de pollo, Atún en aceite o tomate, Trucha ahumada
Sardinas en aceite, Bonito en aceite o tomate, Queso de Burgos
Sardinas en tomate, Caballa en aceite o tomate

Pero si te gusta algo más elaborado, los siguientes tentempiés puedes aliñarlos con aceite de oliva o vegetal, sal, pimienta, ajo, limón y todo tipo de finas hierbas.

Gazpacho Endibias con anchoas
Tomate con anchoas, Endibias con atún
Tomate con huevo duro, Endibias con jamón
Tomate con queso fresco, Rodajas de pepino cubiertas de migas de caballa
Tomate con jamón serrano, Huevos duros con filetes de arenques ahumados
Huevo duro con fiambres y tomate, Salmón o trucha ahumada con huevo y limón
Remolacha en vinagre con pepinillos, Pinchos de tortilla francesa con fiambres (york, pavo y pollo), Atún con tomate, Rollitos de jamón York con huevo hilado*
Cebolletas con pepinillos, Rollitos de jamón York con queso fresco*
Boquerones o anchoas con pepinillos, Rollitos de jamón York con espárragos*
Pimientos rellenos de atún, Jamón York con pepinillos y pimiento morrón*
Endibias con queso de Burgos, Pepinillos con anchoas
* (En lugar de jamón york puedes usar fiambre de pavo o pollo).

Al seguir la dieta definitiva nos podemos plantear una pregunta básica: ¿Cuánto tiempo debemos seguir la dieta? Y la respuesta es obvia: hasta que recupere usted la figura y el peso adecuados (ver tabla indicativa adjunta). Nuestra sugerencia es que intente adelgazar hasta llegar al mínimo que aconseja la tabla para su estatura y constitución. Porque luego, al pasar a la fase de mantenimiento, siempre se pueden recuperar un par de kilos o tres (depende de cada persona). La fase de mantenimiento es tan importante o más que la dieta porque si no se hace correctamente se pueden volver a ganar algunos -o muchos- de los kilos perdidos. Como ya explicábamos antes, uno de los fundamentos en que se basa la dieta es la adecuada combinación de los alimentos. Y en ella no se pueden mezclar los alimentos lipídicos o grasos con los glucídicos o azúcares. Ni, obviamente, consumir alimentos gluciido-lipídicos (ver tablas). Pues bien, salvo por la fruta que usted a ingerido por las mañanas, el organismo no ha estado recibiendo todo el azúcar necesario para el normal funcionamiento del organismo. Y lo que ha estado haciendo es obtenerlo del propio cuerpo. ¿Cómo? Pues quemando las grasas de reserva para, transformándola, sacarlo de ella. Esa es la razón de que usted haya podido notar una ligera cetosis, lo cual no debe preocuparle sino alegrarle porque es señal inequívoca de que está adelgazando.

La fase de mantenimiento tiene por objeto permitir al cuerpo adaptarse a su nueva situación. Por tanto, y al menos durante dos meses (tres si tiene que perder más de diez kilos), lo único que podrá incorporar a los alimentos permitidos de la primera fase son el pan integral, las pastas integrales (espaguetis, macarrones, ravilois, etc.) y las legumbres. Asimismo podrá tomar un vaso de vino mediano -y sólo uno- en una de las comidas diarias. Con una condición: estos
alimentos han de tomarse con moderación y además ese día no se podrá comer pescado graso
o jamón curado. Es todo. Transcurridos los dos -o tres- meses, incorpore poco a poco en su alimentación los demás alimentos. Todos... pero con moderación. Y recuerde siempre que las normas para combinarlos bien son para toda la vida. Por supuesto, de usted dependerá volver o no a las andadas. Es decir, evite ingerir demasiados alimentos glucido-lipídicos porque engordan por sí solos sin necesidad de combinarlos. Y evite ingerir hidratos de carbono en demasía o si ingiere alimentos grasos ese día. Y así, si quiere comerse un cochinillo, hágalo y acompáñelo de verduras y hortalizas en vez de patatas. Y, por supuesto no tome pan o postre que contengan glúcidos. O en el caso de que prefiera beber un buen vino, absténgase de grasa e ingiera pescado o marisco.
En suma, se trata sólo de no abstenerse de nada... pero combinando bien los alimentos.

NORMAS ESPECIALES PARA LAS MUJERES DE MAS DE 45 AÑOS

A partir de cierta edad -generalmente hacia los 45
años-, las mujeres sufren un cambio metabólico
importante que requiere tratar su caso de forma
aparte.
Lo primero será averiguar si tiene déficit de algún
mineral y, si es así, solucionarlo tomando algún
complejo químico porque la inadecuada
metabolización de minerales impide al organismo
depurarse. Es importante que este se encuentre
equilibrado ya que un superávit o déficit de potasio,
por ejemplo, le llevará a retener más o menos
líquido. Lo mismo sucede con el hierro y el
estreñimiento. De hecho, como no va a tomar
carnes rojas ni leche, deberá complementar la dieta
al menos con las dosis adecuadas de calcio y
hierro.
Las mujeres de más de 45 años y con desajustes
hormonales deben saber que es la mala
metabolización de los alimentos junto a la retención
de sales y, por consiguiente de líquidos, lo que
hace aumentar la grasa en zonas localizadas del
abdomen, cintura y caderas. De ahí la sugerencia
de someterse a un chequeo antes de comenzar la
Dieta.
Además, y en la medida de lo posible, deben
acostumbrarse a intentar ingerir la misma cantidad
de agua cada día, cuanta más mejor, así como a
hacer algún ejercicio diario sin excusas.
En cuanto a la alimentación, no deberán tomar la
fruta de la mañana si a mediodía piensan comer
ensalada, ni mezclar las verduras u hortalizas de
hoja con las de carácter sedentario (las que se dan
principalmente en tierras secas: espárragos,
pimiento, puerros, etc.). También han de suprimir
por completo la ingesta de antiácidos ya que
afectan mucho la correcta asimilación de otros
ácidos naturales. Deben abstenerse completamente
de tomar café y té.
Y perdónennos si damos un disgusto a alguna, pero
a partir de la menopausia las mujeres no deberían
volver a ingerir carnes rojas nunca más. Por
supuesto, es su vida, así que ustedes deciden.
Teniendo en cuenta estas directrices, la dieta -tanto
la de adelgazamiento como la de mantenimientotambién
en su caso es eficaz.

PREGUNTAS Y RESPUESTAS